En el centro poblado de San Isidro, ubicado en la región Amazonas, más de 60 niños han enfrentado dificultades extremas para acceder a la educación desde 2022. Un hundimiento del suelo destruyó la infraestructura de la Institución Educativa Nro 16277, dejándolos sin aulas y obligándolos a estudiar en condiciones precarias. Durante años, la comunidad ha buscado soluciones sin obtener respuestas concretas del Ministerio de Educación.
Un Inicio de Clases en Condiciones Inadecuadas
Este 2025, el año escolar comenzó en una vivienda prestada por un vecino, aún en construcción. Aunque representa un refugio temporal, la estructura carece de puertas, ventanas y mobiliario adecuado, lo que dificulta la enseñanza. Los padres y docentes han unido esfuerzos para edificar una nueva escuela en un terreno destinado para ello, pero la falta de recursos sigue siendo un gran obstáculo.
Exigencia de Soluciones Inmediatas
Los padres de familia han alzado su voz para exigir que sus hijos reciban una educación digna. "No es justo que nuestros niños estudien en estas condiciones mientras otros colegios tienen todo lo necesario", expresaron en una manifestación pacífica con carteles en mano. La comunidad demanda atención urgente de las autoridades educativas para acelerar la construcción de nuevas aulas.
Crisis Educativa en Toda la Región
Un informe reciente de la Contraloría General reveló que este no es un caso aislado. En la región Amazonas, más de 30 escuelas enfrentan problemas similares. Infraestructura en mal estado, falta de mobiliario, ausencia de servicios básicos como agua y electricidad, y escasez de docentes son algunas de las graves deficiencias encontradas en la supervisión del Operativo Educación 2025.
Además, muchas instituciones no cuentan con planes de gestión de riesgos, lo que las expone a emergencias sin protocolos adecuados. La falta de accesibilidad para estudiantes con discapacidad y la ausencia de psicólogos agravan aún más la situación.
Un Llamado a la Acción
La comunidad educativa espera que las autoridades actúen con rapidez para garantizar condiciones óptimas para el aprendizaje. La educación es un derecho fundamental y no debe ser postergado. La Dirección Regional de Educación de Amazonas ha recibido el informe detallado de las deficiencias detectadas, y se espera que tome medidas urgentes para revertir esta crisis.
La situación de estos niños en Amazonas refleja una realidad que no puede ser ignorada. Es momento de priorizar la educación y ofrecer a los estudiantes un entorno digno donde puedan desarrollarse y construir su futuro.